En la gastronomía española, existe una gran variedad de postres deliciosos y típicos de cada región. Uno de ellos es la famosa tarta de pastel de nata, un postre que se ha convertido en un clásico en muchas mesas españolas. En este artículo, te enseñaré cómo preparar esta deliciosa tarta y te contaré un poco sobre su origen y características.
Origen e historia
La tarta de pastel de nata, también conocida como tarta de crema o tarta de nata, es un postre de origen portugués. Se cree que fue creada en el siglo XVIII por los monjes del convento de los Jerónimos en Belém, una zona de Lisboa. Originalmente, se llamaba «pastéis de Belém» y su receta era un secreto de los monjes, que la vendían en la zona para obtener ingresos.
Con el paso del tiempo, la receta se fue extendiendo y adaptando en diferentes regiones de Portugal y España, hasta convertirse en un postre muy popular en ambos países. Hoy en día, es posible encontrarla en muchas pastelerías y restaurantes de todo el mundo.
Ingredientes y preparación
Para preparar una deliciosa tarta de pastel de nata, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 1 lámina de masa quebrada
- 500 ml de nata para montar
- 150 g de azúcar
- 5 yemas de huevo
- 1 cucharada de harina de maíz
- Canela en polvo
Para empezar, precalienta el horno a 180 grados y extiende la masa quebrada en un molde para tarta. Pincha la masa con un tenedor y hornéala durante 10 minutos.
Mientras tanto, en un bol, mezcla la nata, el azúcar, las yemas de huevo y la harina de maíz hasta que quede una mezcla homogénea. Vierte la mezcla sobre la masa quebrada precocida y espolvorea con canela en polvo.
Hornea la tarta durante 30-40 minutos, hasta que la superficie esté dorada y la crema haya cuajado. Deja enfriar y sirve fría o a temperatura ambiente, ¡como prefieras!
Características y curiosidades
La tarta de pastel de nata se caracteriza por su textura cremosa y su sabor dulce, pero no empalagoso. La combinación de la masa crujiente y la crema suave la convierten en un postre irresistible para los amantes de los contrastes.
Una curiosidad sobre esta tarta es que, en Portugal, se sirve con una pizca de canela y azúcar glasé en la superficie, mientras que en España se suele espolvorear solo con canela. Además, en algunas zonas de España, se le añade un toque de limón a la crema para darle un sabor cítrico.
Consejos para la presentación
Si quieres sorprender a tus invitados con una presentación original, puedes utilizar moldes individuales para hacer mini tartas de pastel de nata. También puedes decorar con frutos rojos, como fresas o frambuesas, para darle un toque de color y frescura.
Maridaje y recomendaciones
Esta tarta es perfecta para acompañar con un café o té después de una comida. También combina muy bien con un vino dulce, como el Oporto, o con un vino blanco joven y afrutado.
Si quieres probar diferentes versiones de la tarta de pastel de nata, te recomiendo visitar Portugal y probar la original «pastéis de Belém» en la famosa pastelería del mismo nombre. También puedes probar la versión española en diferentes pastelerías y restaurantes de la zona de Galicia, donde es muy popular.
En resumen, la tarta de pastel de nata es un postre delicioso y fácil de preparar, con una historia interesante y una gran versatilidad en su presentación y combinaciones. ¡Anímate a probarla y sorprende a tus seres queridos con este clásico de la gastronomía española!
