La deliciosa y tradicional receta suiza de Raclette
La Raclette es un plato típico de Suiza que se ha convertido en un clásico de la gastronomía suiza y se ha extendido por todo el mundo. Esta receta, además de ser deliciosa, es muy fácil de preparar y es perfecta para compartir en familia o con amigos.
La Raclette es un plato que se prepara con queso fundido y se acompaña de una variedad de ingredientes como patatas, carnes frías, verduras y encurtidos. Es un plato muy versátil, ya que puedes adaptarlo a tus gustos y preferencias.
Origen de la Raclette
La Raclette es originaria de la región alpina de Suiza, específicamente de la zona de Valais. Esta región es conocida por su producción de queso y es aquí donde se elabora el queso específico para la Raclette, conocido como queso Raclette.
El nombre de este plato proviene del verbo francés «racler», que significa «rascar» o «raspar». Esto se debe a que tradicionalmente, el queso se calentaba cerca del fuego y luego se raspaba sobre los ingredientes que se iban a comer.
Ingredientes necesarios
- Queso Raclette
- Patatas
- Carne fría (como jamón, salami o prosciutto)
- Verduras (como champiñones, pimientos o cebollas)
- Encurtidos (como pepinillos o cebollitas)
Preparación
Para preparar la Raclette, necesitarás un aparato específico para fundir el queso, conocido como Raclette grill. Si no tienes este aparato, también puedes usar una sartén antiadherente.
Primero, pela y corta las patatas en rodajas finas y cocínalas en agua hirviendo hasta que estén tiernas. Mientras tanto, corta las carnes frías en trozos pequeños y corta las verduras en rodajas.
Una vez que las patatas estén listas, escúrrelas y colócalas en una fuente para servir. Luego, enciende el Raclette grill y coloca el queso Raclette en las bandejas individuales. Deja que el queso se derrita y luego raspa sobre las patatas.
Ahora, puedes colocar las carnes frías y las verduras en la parte superior del queso fundido y dejar que se cocinen en el grill. Una vez que estén listas, retíralas del grill y sírvelas junto con las patatas y el queso fundido.
¿Cómo comer la Raclette?
La Raclette se come tradicionalmente con una copa de vino blanco y se sirve con pan fresco y mantequilla. Para comerla, simplemente coloca una porción de patatas en tu plato y cubre con el queso fundido y los ingredientes que desees. Puedes repetir este proceso varias veces hasta que estés satisfecho.
Algunas personas también prefieren comer la Raclette con una variedad de salsas, como salsa de ajo o salsa de mostaza. Esto le da un toque adicional de sabor al plato.
Curiosidades sobre la Raclette
Además de ser un plato delicioso, la Raclette también tiene algunas curiosidades interesantes:
- En Suiza, se celebra el Día Nacional de la Raclette el segundo martes de abril.
- El queso Raclette es un queso semiduro hecho de leche de vaca y se elabora en ruedas de 6 kg.
- El queso Raclette se puede encontrar en diferentes variedades, como el queso Raclette ahumado o el queso Raclette con hierbas.
- En algunos países, como Francia y Alemania, se prepara una versión de la Raclette con queso Emmental.
En resumen
La Raclette es un plato delicioso y versátil que se ha convertido en un clásico de la gastronomía suiza. Es perfecto para compartir con amigos y familiares y se puede adaptar a diferentes gustos y preferencias. Atrévete a probar esta receta suiza y disfruta de su delicioso sabor y su historia.