Receta: Capirotada
La capirotada es un delicioso postre típico de la gastronomía mexicana, especialmente popular durante la Cuaresma y Semana Santa. Esta receta combina sabores dulces y salados, y su origen se remonta a la época colonial, cuando los españoles introdujeron los panes y quesos en México.
Esta deliciosa mezcla de ingredientes se ha ido adaptando a lo largo de los años y se han añadido otros elementos como frutas, nueces y especias, lo que ha dado lugar a diferentes versiones de la capirotada en diferentes regiones de México.
Ingredientes:
- 1 bolillo o pan de caja cortado en rebanadas
- 1 taza de piloncillo rallado
- 2 tazas de agua
- 1 raja de canela
- 2 clavos de olor
- 1/4 de taza de pasas
- 1/4 de taza de nueces picadas
- 1/4 de taza de almendras picadas
- 1/4 de taza de cacahuates
- 1/4 de taza de coco rallado
- 1/4 de taza de queso panela o queso fresco desmoronado
Preparación:
- En una olla, mezcla el piloncillo rallado, el agua, la canela y los clavos de olor. Deja hervir hasta que se disuelva el piloncillo y se forme un jarabe espeso.
- En una fuente para horno, coloca una capa de rebanadas de pan y vierte un poco del jarabe encima. Agrega una capa de pasas, nueces, almendras, cacahuates, coco y queso.
- Repite el proceso hasta que se terminen los ingredientes, asegurándote de terminar con una capa de pan y jarabe en la parte superior.
- Tapa la fuente con papel aluminio y hornea a 180°C durante 20 minutos.
- Retira el papel aluminio y deja que se dore la parte superior de la capirotada durante 10 minutos más.
- Sirve caliente y disfruta de este delicioso postre tradicional.
La capirotada es un postre muy versátil, ya que puedes agregar o quitar ingredientes según tus gustos y preferencias. Algunas versiones incluyen piña, manzana, plátano, dátiles, ciruelas pasas, entre otros.
Además, este platillo no solo es popular en México, sino que también se ha extendido a otros países latinoamericanos como Guatemala, El Salvador y Nicaragua, donde se le conoce como «capirotada» o «capirotada de pan».
En cuanto a su origen, se dice que la capirotada era una forma de aprovechar los restos de pan y otros ingredientes que quedaban en las cocinas de las familias durante la época colonial. Sin embargo, también se le atribuye un origen religioso, ya que los diferentes ingredientes que se utilizan en la receta representan a los elementos de la Pasión de Cristo.
En resumen, la capirotada es un postre tradicional y delicioso que forma parte de la identidad gastronómica de México y otros países latinoamericanos. Su mezcla de sabores dulces y salados, junto con su historia y versatilidad, la convierten en una receta imperdible para probar y disfrutar en familia durante la Cuaresma y Semana Santa.
