La soupe à l’Oignon es una sopa tradicional francesa, originaria de la región de Lyon. También conocida como sopa de cebolla, es un plato típico de la cocina francesa que se ha vuelto popular en todo el mundo por su delicioso sabor y su fácil preparación.
Esta sopa es un plato muy versátil, ya que puede ser servida como entrada o como plato principal acompañada de pan o croutons. Además, es ideal para los días fríos de invierno, ya que su calidez y su aroma a cebolla y caldo de carne la convierten en una opción reconfortante y deliciosa.
Ingredientes:
- 1 kg de cebollas
- 50 g de mantequilla
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de azúcar
- 2 cucharadas de harina
- 1 litro de caldo de carne
- 150 ml de vino blanco
- 1 ramita de tomillo
- 1 hoja de laurel
- Sal y pimienta al gusto
- Queso gruyere rallado
- Rebanadas de pan
Preparación:
Comenzaremos por cortar las cebollas en juliana y reservarlas. En una olla grande, derretiremos la mantequilla junto con el aceite de oliva a fuego medio. Una vez derretida, agregaremos las cebollas y las dejaremos cocinar por aproximadamente 30 minutos, hasta que estén suaves y caramelizadas.
Después de 30 minutos, agregaremos el azúcar y la harina, y mezclaremos bien hasta que se integren con las cebollas. Luego, verteremos el caldo de carne y el vino blanco, y añadiremos la ramita de tomillo y la hoja de laurel. Dejaremos cocinar a fuego medio durante 15 minutos, revolviendo ocasionalmente.
Mientras tanto, precalentaremos el horno a 200°C. En una bandeja para hornear, colocaremos las rebanadas de pan y las cubriremos con queso gruyere rallado. Las hornearemos hasta que el queso se derrita y se dore.
Una vez lista la sopa, la serviremos en platos individuales y colocaremos encima una rebanada de pan con queso gratinado. Podemos espolvorear un poco de pimienta negra molida y un poco más de queso gruyere si así lo deseamos. ¡Y ya estará lista nuestra deliciosa soupe à l’Oignon!
Orígenes de la Soupe à l’Oignon:
Esta sopa es originaria de la región de Lyon, en Francia, y se cree que su receta original data del siglo XVII. En aquel entonces, era un plato popular entre la clase trabajadora, ya que los ingredientes eran económicos y fáciles de conseguir.
Con el tiempo, la soupe à l’Oignon se fue extendiendo por toda Francia y se fueron incorporando diferentes variaciones en su preparación. En algunas regiones se le añade vino tinto en lugar de blanco, en otras se agregan diferentes hierbas y especias, y en algunas incluso se le añade un huevo pochado encima.
Beneficios nutricionales:
Aunque la soupe à l’Oignon no es una sopa ligera, ya que contiene mantequilla y queso, sí es una opción nutritiva y saludable gracias a sus ingredientes principales: las cebollas.
Las cebollas son ricas en vitaminas, minerales y antioxidantes, y tienen propiedades antiinflamatorias y antibacterianas. Además, son bajas en calorías y contienen fibra, lo que las convierte en una opción ideal para incluir en nuestra dieta.
Conclusión:
La soupe à l’Oignon es un plato clásico de la cocina francesa que ha conquistado paladares en todo el mundo. Su sabor único y su versatilidad la hacen perfecta para cualquier ocasión, ya sea para una cena elegante o para una comida reconfortante en un día frío.
Además, su preparación es sencilla y sus ingredientes son económicos y fáciles de conseguir. Así que no hay excusa para no probar esta deliciosa sopa francesa. ¡Anímate a prepararla y sorprende a tus seres queridos con un plato lleno de sabor y tradición! Bon appétit!