Introducción
El Naan-e Lavash es un pan plano tradicional de Irán, muy popular en todo el país. Se caracteriza por su forma ovalada y su textura crujiente. Es un acompañamiento perfecto para platos de carne, ensaladas y sopas. Además, es una excelente opción para disfrutarlo con hummus, labneh o queso feta.
Origen e historia
El origen del Naan-e Lavash se remonta a la antigua Persia, donde se preparaba en los hornos de barro de los pueblos nómadas. En aquella época, se solía hacer en grandes cantidades para poder alimentar a toda la tribu durante los largos viajes. Con el tiempo, se fue extendiendo por todo Irán y se convirtió en un plato típico de la gastronomía persa.
Ingredientes
- 500 gramos de harina de trigo
- 1 cucharada de levadura en polvo
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada de azúcar
- 1 huevo
- 1 taza de agua tibia
- 3 cucharadas de aceite de oliva
Preparación
- En un bol, mezcla la harina, la levadura, la sal y el azúcar.
- Añade el huevo y el agua tibia y mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
- Agrega el aceite de oliva y sigue amasando hasta que la masa se despegue de las manos.
- Cubre la masa con un paño y deja reposar durante 30 minutos.
- Divide la masa en pequeñas porciones y extiéndelas con un rodillo sobre una superficie enharinada.
- Coloca los panes sobre una bandeja de horno y pínchalos con un tenedor para evitar que se inflen.
- Hornea a 200 grados durante 10-15 minutos, hasta que estén dorados y crujientes.
- Sirve caliente y disfruta de su delicioso sabor.
Variaciones y acompañamientos
El Naan-e Lavash puede ser preparado de diferentes formas, dependiendo de la región de Irán. Algunas variaciones incluyen añadir semillas de sésamo o comino a la masa, o espolvorear hierbas como el orégano o el cilantro por encima antes de hornear. Además, se puede servir con diferentes acompañamientos como hummus, labneh, queso feta, aceitunas, tomates y pepinos.
Conclusión
El Naan-e Lavash es un plato típico de Irán que ha conquistado paladares en todo el mundo. Su sabor único y su textura crujiente lo convierten en un acompañamiento perfecto para cualquier comida. Además, su historia y su importancia en la cultura persa lo hacen aún más interesante. Así que no dudes en probar esta deliciosa receta y disfrutar de un pedacito de Irán en tu mesa.
¡Buen provecho!